lunes, 28 de abril de 2008

...Y Sevilla.

Cuando paso por Sevilla recuerdo que el callejón del Agua desemboca en la calle de la Vida y creo que eso debe tener algún significado. Luego, giro a la izquierda por la calle de la Judería y llego a esa fuente que custodian bellos versos de Cernuda. Unos pasos más adelante, entre las sombras y la fresca humedad del pasadizo, siento las pisadas y las estocadas de mi viejo Capitán antes de verla a ella donde la dejé, enmarcada por el arco de medio punto y enhiesta sobre el cielo sevillano. Armónica, perfecta, proporcionada y vieja como ella sola, corazón de la ciudad que me enamora, retablo catedralicio y palco de la madrugada. Queriéndolo o sin quererlo vuelvo por esas calles y tú vuelves a estar ahí siempre para mí, Giralda.

1 comentarios:

illeR dijo...

Te paso una foto de la giralda que saque en agosto un dia de tormenta de verano
http://img74.imageshack.us/my.php?image=cimg4918ae0.jpg